Su presentador inicial fue Kiko Ledgard, un presentador peruano que alcanzó gran popularidad en España aunque solo presentó este programa hasta que falleció al caerse por accidente desde su terraza de su domicilio madrileño cuando estaba entreteniendo a sus 12 hijos para que se rieran, nada hacía presagiar que lo que tuvieron que ver sus hijos, finalmente, fue un show dantesco.
Al igual que su presentador, también es muy recordada su sintonía de cabecera, escrita e interpretada por el creador del concurso: Chicho Ibáñez Serrador.
Después de 54 semanas en antena, el programa se despide sin saber que poco después volvía para iniciar una segunda temporada, y así, con pausas más o menos largas estuvo el Un, Dos, Tres,... en TVE hasta el año 2004.
Junto a su presentador, en la parte amable del programa estaban las secretarias. De duros castings para trabajar en el programa salieron muchas actrices, suponiendo para ellas una plataforma de lanzamiento sensacional para seguir en el mundo del espectáculo: Victoria Abril, Lidia Bosch, Silvia Marsó, María Casal, Nina, Alejandra Grepi, Agata Lys, y un largo etcétera, han pasado por diferentes etapas del programa y luego han despuntado en el cine, teatro o televisión. La verdad es que en esa época, la audiencia era multimillonaria ya que no había llegado la diversificación a la tele, y lo espectacular del concurso hacía que casi todo el mundo estuviera delante de su televisor los lunes por la noche.
En la parte negativa del programa estaban Los Tacañones, los que se enfadaban cuando algún concursante se llevaba mucho dinero en la ronda de preguntas. En la primera temporada el Tacañón jefe fue el actor Valentín Tornos, sustutuído posteriormente por los actores Paco Cecilio, Blaki y el mago Juan Tamariz, para ser encarnados en las últimas temporadas por las Hermanas Hurtado.
El concurso, si bien estuvo presentado en sus inicios por Kiko Ledgard, al caer éste enfermo fue sustituído por una de las actrices que participaba en la segunda parte del programa. Era una desconocida por el gran público pero pronto se ganó el cariño, la admiración y el respeto del público: Mayra Gómez Kemp. Mayra permaneció en el programa hasta que decidió no incorporarse para cuidar a su marido enfermo. Los siguientes conductores del programa fueron el tándem Jordi Estadella (recientemente fallecido) y Miriam Díaz Aroca, Josep María Balcells y Luis Larrodera en un experimento de Un, Dos, Tres encargado de promocionar la lectura que no obtuvo el éxito esperado.
En la primera fase, las 3 parejas de concursantes tenía que contestar a preguntas de cultura general. la que ganaba volvia la semana que viene a concursar, y las dos restantes participaban en una prueba que decidía qué pareja participaba en la segunda fase, que era la espectacular subasta con una escenografía poco habitual en esa época, en la que se podía ganar los premios estrella que siempre eran el coche y el apartamento en Torrevieja, o la temida Ruperta, la calabaza mascota del programa. Esta mascota fue la que tuvo más éxito, ya que tras unas cortas ausencias acabó volviendo porque el público la reclamaba y caía simpática aunque supusiera que los concursantes se iban a casa con las manos vacías. Estas ausencias a las que me refiero fueron cubiertas puntualmente por el Boom y el Crack, y Botilde, una vieja bota, que no consiguieron hacernos olvidar a Ruperta.
Por la subasta también desfilaron los humoristas más populares de la época, suponiendo para éstos un importante escaparate y un trampolín para los que descubrió Chicho, como es el caso de Angel Garó, Beatriz Carvajal o "La Bombi" Fedra Lorente.
Que sirva esta entrada para homenajear humildemente a un mago de la televisión, creador de los formatos más innovadores que han pasado por la pequeña pantalla. Fue artífice del primer programa de sexo en televisión y del descubrimiento de la doctora Elena Ochoa, hoy reconvertida en Lady Foster, creador del ecológico concurso de animales Waku Waku y descubridor para la televisión nacional de la valenciana Nuria Roca, adalid del terror televisivo con las inolvidables Historias para no dormir y crítico con la doble moral de la negra España de la época con las recordadas Historias de la frivolidad. No ha conocido el fracaso, ha proporcionado éxitos sin precedentes a la televisión pública y ha sido el cazatalentos de numerosas figuras y personajes que hoy día triunfan en el show business o lo hicieron en su día gracias a él. Todos querían trabajar a su lado, sabían que él era una garantía de éxito e iba a suponer un máster de aprendizaje para el futuro, pero hoy día, postrado en una silla de ruedas y alejado de la vida pública, me pregunto si estará esperando el gran homenaje popular que se merece, o sabrá que se lo rendirán a su muerte, cuando ya no esté para disfrutarlo. Chicho Ibáñez Serrador, el maestro de la televisión
Para mi gusto, un programa-consurso super-entretenido. Yo creo que todos los que lo seguíamos, concursabamos desde casa, sentados en nuestro sillón.
ResponderEliminarDos compañeros mios, de clase y de panda, de cuando estaba estudiando RRPP, se presentaron y lo pasamos bárbaro...., lo que nos pudimos reir. No pasaron la eliminatoria de las parejas que quedaban para, luego, optar a los premios y disfrutar de toda la parafernalia que se organizaba para presentarlos.
Realmente, el ya desaparecido Chicho, siempre acertó con sus inventos televisivos. También tenía un gran ojo clínico para escoger a los presentadores, de los cuales, la única que sobrevive, milagrosamente, tras superar su cáncer de lengua, es Mayra Gómez Kemp, pues Jordi Estadella también corrió la misma suerte que el entrañable Kiko Ledgard.
Que nos esperen muchos años, allí dónde se encuentren y un cariñoso recuerdo para ellos.
Ya no volverá UN, dos, tres..., responda otra vez, ni sus supertacañones, ni las mamachicho, ni el dúo sacapuntas, ni la bombi....Por eso ya es leyenda de la televión de una época y por lo tanto.... telenostalgia.
Eli!!!!!!!!!!! que te has cargado a Chicho?
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